sábado, 16 de junio de 2007

Anuncian huelga las salas de cine para el lunes

Los cines españoles se niegan a cumplirla cuota de pantalla, y en esas continúan hasta el punto de que han programado una huelga para el próximo lunes, justo el día de la semana en que no va prácticamente nadie, así pueden dar la pataleta con el mínimo perjuicio económico.
Tontos no son, eso ya lo tenemos claro.
La culpa debe ser del cine español, que es demansiado intelectual intelectual (ays, agujetas tengo de tanta risa), pero en medio de todo esto nos olvidamos de un buen número de espectadores que no tenemos acceso al cine original subtitulado en nuestras ciudades, ni a una mínima parte que se pudiera considerar razonable de cine europeo.
Perdón, que siempre me olvido de que este sector no interesa a nadie, continuo entonces, el paro patronal convocado por Fece
se debe, según cuentan en La Vanguardia a las siguientes reivindicaciones:

En primer lugar las salas consideran que la cuota de pantalla (dichoso 25%) les obliga a programar películas (españolas) cuya recaudación es muy baja, lo que según Rafael Alvero, presidente de Fece, les ha supuesto dejar de ganar mil millones (no especifica si de euros, regalices o palomitas). Por lo tanto consideran que la cuota debe ser considerada inversión forzosa y por tanto generar alguna contrapartida.
La segunda queja se debe a que las salas dicen estar a merced de las cinco grandes majors norteamericanas que marcan precios de alquiler muy superiores a los del resto de Europa y obligan a programar películas en paquetes (es decir por una con buena taquilla tienen que sacar varias que no va a ver nadie), y piden que el gobierno intervenga, de acuerdo con los postulados del Tribunal de Competencia, que ya les dio la razón parcialmente.
Es decir, que los cines españoles no tragan con la cuota de cine europeo porque les supone pérdidas, pero en cambio si tragan con los bodrios desconocidos que les endosan las majors norteamericanas (que también les producen pérdidas), y encima quieren que venga el gobierno a sacarlos del lodazal donde se han metido, que les sale muy caro. Al menos esto es lo que entiendo yo, hasta donde mis desgastadas neuronas me permiten.
Por último, para ganarse la simpatía supongo de todos los consumidores, piden que la ley consagre las ventas de exhibición, es decir, que no pueda ser comercializada una película en televisión o DVD hasta seis meses después de su estreno, algo que actualmente se cumple, pero que no hay garantía legal de que siga siendo así en el futuro, ante el empuje de las descargas legales o ilegales en internet.


¿Tan difícil sería dedicar algunas de las primeras sesiones a cine europeo en versión original?

¿No sería una forma de dar vida a unos horarios desaprovechados que se llenarían (al menos en parte) por un sector de público eternamente agradecido, que hasta ahora esta siendo ignorado totalmente en la mayoría de ciudades españolas?


¿Cuando uno monta una sala de cine, no sería bonito que tuviera algo de amor y respeto por el cine, para variar?